El arte de discutir en pareja
Muchos creen que una pareja sana y bien llevada no discute… pero eso no es así. El secreto de las discusiones dentro de una pareja bien avenida se basa en unas reglas básicas.
Discutir sólo sobre la situación presente que los ha llevado al desacuerdo.
No sacar “nunca” a relucir “la agenda oculta”que todos tenemos guardada. Agenda oculta es aquella donde mentalmente vamos apuntando todos los agravios de los que nos sentimos objeto por parte de nuestro compañero/a. Lo ideal es que esta agenda no exista.
No faltar el respeto ni insultar.
No mencionar a la familia original de la otra persona.
No ironizar dentro del contexto de la discusión.
Intentar no gritar ya que al hacerlo nuestro argumento pierde fuerza.
Pedir disculpas sinceras cuando sea pertinente.
Siguiendo estas simples (aunque a veces complicadas) pautas, una discusión será más bien un intercambio de opiniones, un poco crispado, más que una guerra donde cada palabra es un arma con la que herir a nuestro compañero/a con el que compartimos vida.
Porque no debo olvidar que esta persona con la que estoy discutiendo, es mi compañero de vida, mi compañero de proyecto vital, al que amo y respeto por encima del enfado.
Si ves que las discusiones con tu pareja son algo cotidiano, generan sufrimiento y te cuesta recomponerte después de una discusión, ven a verme, me cuentas, charlamos y vemos juntos cómo gestionar este tema.
Buen día y buena vida.
Vero.